Religión en Libertad
(18/12/2014): William J. Tighe, profesor de Historia de la Universidad
de Muhlenberg, publicó en 2003 un análisis sobre el origen de la fecha
de la Navidad cristiana en el 25 de diciembre, negando que se tratase de
una fecha que buscase suplantar una fiesta pagana previa, como acusan a
veces algunos neopaganos, ciertos grupos protestantes y revisionistas
históricos.
"Los orígenes paganos de la Navidad son un mito sin fundamento
histórico", asegura, y como especialista en los siglos XVI a XVIII puede
localizar a los personajes que s einventaron esta idea del "origen
pagano": el protestante alemán Paul Ernst Jablonski y el monje francés
Jean Hardouin.
Análisis completo traducido de la revista ecuménica "Touchstone": Calculando la Navidad: la auténtica historia del 25 de diciembre por William J. Tighe.
Muchos cristianos creen que el cristianismo celebra el nacimiento de
Cristo el 25 de diciembre porque los padres de la Iglesia se apropiaron
de la fecha de un festival pagano. Casi nadie da importancia a este
hecho, excepto algunos grupos marginales de evangélicos americanos, que
parecen interpretar que ello convierte a la Navidad en un festival
pagano.
Sin embargo, resulta interesante saber que la opción del 25 de diciembre
es el resultado de los intentos realizados por los primeros cristianos
para averiguar la fecha de nacimiento de Jesús, basándose en cálculos de
calendario quenada tenían que ver con los festivales paganos.
Fue más bien al contrario, ya que el festival pagano del "Nacimiento del
Sol Invicto", instituido por el emperador romano Aureliano el 25 de
diciembre de 274, fue casi con toda certeza un intento de crear la
alternativa pagana a una fecha que ya gozaba de cierta importancia para
los cristianos romanos. Así pues, "los orígenes paganos de la Navidad"
son un mito sin fundamento histórico.
El filósofo luterano alemán Paul Ernst Jablonski fue el primero en
publicar en 1743 que la fechadel 25 de diciembre y la Navidad era
una"paganización" del cristianismo (hoy se usa el argumento como una
"cristianización" del paganismo)
La idea de que la fecha fue sacada de los paganos se remonta a dos
estudiosos de finales del siglo XVII y principios del XVIII. Paul Ernst
Jablonski, un protestante alemán, pretendía demostrar que la celebración
del nacimiento de Cristo el 25 de diciembre era una de las muchas
"paganizaciones" del cristianismo que la Iglesia del siglo IV había
adoptado, como una de las muchas "degeneraciones" que habían
transformado el cristianismo apostólico puro en catolicismo.
Dom Jean Hardouin, un monje benedictino, intentó demostrar que la
Iglesia católica había adoptado festivales paganos para fines cristianos
sin paganizar el Evangelio. En el calendario juliano, creado en el año
45 a.C. bajo Julio César, el solsticio de invierno caía en 25 de
diciembre y, por tanto, a Jablonski y a Hardouin les pareció evidente
que esa fecha debía haber contenido obligatoriamente un significado
pagano antes de haber sido cristiano.
Pero en realidad, la fecha no había tenido ningún sentido religioso en
el calendario festivo pagano en tiempos anteriores a Aureliano, y el
culto al sol tampoco desempeñaba un papel importante en Roma antes de su
llegada.
Había dos templos del sol en Roma. Uno de ellos (mantenido por el clan
en el que nació o fue adoptado Aureliano) celebraba su festival de
consagración el 9 de agosto, y el otro el 28 de agosto. Sin embargo,
ambos cultos cayeron en desuso en el siglo II, en que los cultos solares
orientales, como el mitraísmo, empezaron a ganar adeptos en Roma. Y en
cualquier caso, ninguno de estos cultos, antiguos o nuevos, tenían
festivales relacionados con solsticios o equinoccios.
Lo que ocurrió realmente fue que Aureliano, que gobernó desde el año 270
hasta su asesinato en 275, era hostil hacia el cristianismo, y está
documentado que promocionó el establecimiento del festival del
"Nacimiento del Sol Invicto" como método para unificar los diversos
cultos paganos del Imperio Romano alrededor de una conmemoración del
"renacimiento" anual del sol. Lideró un imperio que avanzaba hacia el
colapso, ante las agitaciones internas, las rebeliones en las
provincias, el declive económico y los repetidos ataques por parte de
tribus germanas por el norte y del Imperio Persa por el este.
Al crear esa nueva festividad, su intención era que el día 25, en el que
comenzaba a alargarse la luz del día y a acortarse la oscuridad, fuera
un símbolo del esperado "renacimiento" o eterno rejuvenecimiento del
Imperio Romano, que debía ser el resultado de la perseverancia en la
adoración de los dioses cuya tutela (según creían los romanos) había
llevado a Roma a la gloria y a gobernar el mundo entero. Y si podía
solaparse con la celebración cristiana, mejor aún.
Cálculos navideños ¡antes de tener fecha litúrgica!: Es cierto
que la primera prueba de una celebración cristiana en 25 de diciembre
como fecha de la Natividad del Señor se encuentra en Roma, algunos años
después de Aureliano, en el año 336 d.C., pero sí hay pruebas del Este
griego y del oeste latino donde los cristianos intentaban averiguar la
fecha del nacimiento de Cristo mucho antes de que lo empezaran a
celebrar de una forma litúrgica, incluso en los siglos II y III. De
hecho, las pruebas indican que la atribución a la fecha de 25 de
diciembre fue una consecuencia de los intentos por determinar cuándo se
debía celebrar su muerte y resurrección.
[Tighe no lo detalla, pero un ejemplo claro es el de Sexto Julio
Africano, escritor cristiano que en el año 221, en sus Chronographiai,
ya establece que Jesús se encarnó en 25 de marzo (por lo que nació 9
meses después, en 25 de diciembre). Esto lo escribe medio siglo antes de
que en el 274 Aureliano cree una fiesta para el 25 de diciembre en
Roma. Nota de ReL].
¿Y cómo ocurrió todo esto?: Parece haber una contradicción en la
fecha de la muerte del Señor entre los Evangelios Sinópticos y el
Evangelio de Juan. Los sinópticos la situarían en la Pascua de los
judíos (después de la Última Cena la noche anterior), mientras que Juan
la describiría en la Víspera de la Pascua, en el momento en que los
corderos eran sacrificados en el Templo de Jerusalén para el ágape que
tendría lugar después de la salida del sol ese mismo día.
La solución a esta cuestión implica contestar a la pregunta de si la
Santa Cena fue un ágape pascual o una cena que tuvo lugar un día antes,
lo cual no estudiaremos aquí. Basta con decir que la primitiva Iglesia
siguió a Juan y no a los sinópticos y, por tanto, creyó que la muerte de
Cristo había tenido lugar el 14 Nisán, de acuerdo con el calendario
lunar judío.Por cierto, los estudiosos modernos se muestran de acuerdo
con que la muerte de Cristo podría haber tenido lugar en el año 30 o en
el 33 d.C., ya que éstos son los únicos años de esa época en los que la
Vigilia de Pascua podían haber caído en viernes. Las posibilidades son,
por tanto, el 7 de abril del 30 o el 3 de abril del 33.
Sin embargo, dado que la Iglesia primitiva fue forzosamente separada del
judaísmo, entró en un mundo de calendarios distintos y tuvo que
instaurar sus propios momentos para celebrar la Pasión del Señor, en
parte también para independizarse de los cálculos rabínicos de la fecha
de Pascua.
Por otra parte, como el calendario judío era un calendario lunar que
constaba de 12 meses de 30 días cada uno, cada pocos años debía añadirse
un mes decimotercero por un decreto del Sanedrín, para mantener el
calendario sincronizado con los equinoccios y los solsticios, así como
para evitar que las estaciones se fueran "desviando" hacia meses
inapropiados.
Aparte de la dificultad que debieron tener los cristianos en investigar,
o quizás en ser bien informados sobre las fechas pascuales en un
determinado año, el hecho de seguir un calendario lunar diseñado por
ellos habría dispuesto en su contra tanto a judíos como a paganos, y
seguramente también les habría sumido en inacabables disputas entre sí
mismos.
El siglo II vio fuertes disputas sobre si la Pascua tenía que caer
siempre en domingo o en cualquier día de la semana dos días después del
14 Artemision/Nisán, pero haber seguido un calendario lunar no habría
hecho más que agravar estos problemas.
Estas divergencias eran interpretadas de distintas maneras entre los
cristianos griegos de la parte oriental del imperio y los cristianos
latinos en la parte occidental del mismo. Parece ser que los cristianos
griegos quisieron encontrar una fecha equivalente a su 14 Nisán en su
propio calendario solar y, dado que el Nisán era el mes en el que tenía
lugar el equinoccio de primavera, eligieron el día 14 de Artemision, el
mes en el que el equinoccio de primavera caía invariablemente en su
propio calendario. Alrededor del 300 d.C., el calendario griego fue
solapado por el romano y, como las fechas de principio y final de los
meses en estos dos sistemas no coincidían, el 14 Artemision se convirtió
en el 6 de abril.
No obstante, parece que los cristianos latinos del siglo II en Roma y
África del norte querían establecer la fecha histórica en la que murió
Jesús. En la época de Tertuliano [c.155 -220 d.C.] habían concluido que
murió en viernes, 25 de marzo del 29.Como nota aparte, debo hacer
constar que ello es imposible: el 25 de marzo del 29 no cayó en viernes,
y la Víspera de Pascua judía en el 29 d.C. no caía en viernes ni en 25
de marzo, ni siquiera en el mes de marzo.
Cuando los antiguos creían en la "edad integral": Así pues, en el
este, tenemos el 6 de abril y, en el oeste, el 25 de marzo. Llegados a
este punto, debemos introducir una creencia que parece ser que se
propagó en el judaísmo en el tiempo de Cristo, pero la cual, como no
aparece en la Biblia, no han tenido presente los cristianos. Se trata de
la "edad integral" de los grandes profetas judíos: la idea de que los
profetas de Israel murieron en la misma fecha que la de su nacimiento o
concepción.
Este conocimiento es un factor clave a la hora de entender por qué
algunos de los primeros cristianos llegaron a la conclusión de que el 25
de diciembre fue la fecha del nacimiento de Jesucristo. Los primeros
cristianos aplicaron esta idea a Jesús, con lo que el 25 de marzo y el 6
de abril no sólo eran las supuestas fechas de la muerte de Jesús, sino
también las de su concepción o nacimiento. Existe alguna prueba fugaz de
que al menos algunos cristianos en los siglos I y II consideraron el 25
de marzo y el 6 de abril como la fecha del nacimiento de Cristo, pero
rápidamente prevaleció la asignación del 25 de marzo como la fecha de la
concepción de Cristo.
Y es en este día, conmemorado casi universalmente entre cristianos como
la Fiesta de la Anunciación, cuando el Arcángel Gabriel llevó la Buena
Nueva de un salvador a la Virgen María, con cuyo consentimiento la
Palabra de Dios ("Luz de Luz, Dios verdadero del Dios verdadero, nacido
del Padre antes de todos los tiempos") se encarnó en su vientre.¿Cuánto
dura un embarazo? Nueve meses. Si contamos nueve meses a partir del 25
de marzo, es 25 de diciembre; si es a partir del 6 de abril, tenemos el 6
de enero. El 25 de diciembre es Navidad y, el 6 de enero, es la
Epifanía.
La Navidad (el 25 de diciembre) es una fiesta de origen cristiano
occidental.Parece que en Constantinopla fue introducida en el año 379 ó
380. De un sermón de San Juan Crisóstomo, que en su época fue un
renombrado asceta y predicador en su nativa Antioquía, parece que ahí la
fiesta se celebró por primera vez el 25 de diciembre del 386. Desde
esos centros, se esparció por todo el Oriente cristiano y se adoptó en
Alejandría alrededor del 432, mientras que en Jerusalén se asumió un
siglo o un poco más después.
Los armenios, sólos entre las Iglesias cristianas antiguas, nunca la
adoptaron,y hasta hoy llevan celebrando el nacimiento de Cristo, la
adoración de los Reyes y el bautismo el 6 de enero.
Por su parte, las Iglesias occidentales fueron adoptando gradualmente la
celebración de la Epifanía del este el 6 de enero, y Roma lo hizo entre
el 366 y el 394. Pero en Occidente, esta festividad se presentaba
normalmente como la conmemoración de la visita de los Reyes Magos al
niño Jesús y, como tal, era una fiesta importante, pero no una de las
más determinantes. Ello provocaba un fuerte contraste con la posición de
la Iglesia oriental, donde sigue siendo la segunda fiesta más
importante de la iglesia después de la Pascua.
En Oriente, la Epifanía es mucho más importante que la Navidad. La razón
es que la festividad también celebra el bautismo de Cristo en el Jordán
y el momento en que la Voz del Padre y el Descenso del Espíritu Santo
manifestaron por primera vez a los mortales la divinidad del Cristo
Encarnado y la Trinidad de las 3 Personas en un solo Dios.
Una fiesta cristiana: Así pues, parece que el 25 de diciembre
como fecha del nacimiento de Cristo no está en absoluto en deuda con las
influencias paganas en las prácticas de la Iglesia durante o después
del tiempo de Constantino.
Es totalmente improbable que fuera la fecha exacta del nacimiento de
Cristo, pero surgió estrictamente de los esfuerzos de los primeros
cristianos latinos para averiguar la fecha histórica de la muerte de
Cristo.
En cambio, la fiesta pagana que instituyó el emperador Aureliano en esa
fecha, en el año 274, no sólo fue un esfuerzo para utilizar el solsticio
de invierno con el objetivo de hacer una declaración política, sino
que, casi con toda certeza, fue también un intento de dar un sentido
pagano a una fecha ya importante para los cristianos romanos.
A su vez, los cristianos podrían más tarde volver a adoptar la fiesta
del "Nacimiento del Sol Invicto" para referirse, en memoria del
nacimiento de Jesús, a la ascensión del "Sol de la Salvación" o el "Sol
de la Justicia".
William J. Tighe recomienda la lectura de Los Orígenes del Año Litúrgico
de Thomas J. Talley sobre la historia de la fecha de Navidad y otras
fechas litúrgicas. El artículo original en inglés está aquí.
-Pagana y feminista que odiaba a los hombres, la historia de Enrique VIII le «descubrió» la Iglesia
-Era hijo de la mano derecha de Hitler y se formó en el nazismo más pagano, pero llegó a ser cura
-«Tolkien, Chesterton y Campbell amaban el paganismo que lleva a Cristo, no el que aleja de Él»
Lea también:
La dictadura puritana y republicana de Cromwell prohibió la Navidad 13 años: ¡pasteles incluidos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario